jueves, 1 de diciembre de 2016

RETO-Una Historia Interactiva

Amado Nervo
Poeta y escritor mexicano 
Nació el 27 de agosto de 1870 en Tepic (Nayarit).
Descendiente de una familia española que se estableció en San Blas.
Su instrucción primaria la realiza en las modestas escuelas de su ciudad natal. Fallece su padre cuando tenía nueve años, y su madre le envió a un Colegio de Padres Romanos, al de Jacona, en Michoacán, que entonces gozaba de cierta fama. En este colegio y después en el seminario de Zamora, Michoacán, hizo sus estudios preparatorios.
Quiso seguir la carrera de abogado y estudió dos años, pero el quebrantamiento rápido de la herencia paterna le obligó a volver a Tepic y ponerse al frente de lo poco que quedaba y a trabajar para ayudar a su familia, que era numerosa.
Después, buscando mejor destino, marchó a Mazatlán, donde escribió en el Correo de la Tarde sus primeros artículos. Más tarde viaja a la Capital (1894) y ahí con los esfuerzos y penalidades consiguientes, logró abrirse camino.
Ingresó en el Cuerpo diplomático; fue embajador de su país en Madrid (España) y en Montevideo(Uruguay). En el año 1894 se trasladó a la ciudad de México donde conoció a Manuel Gutiérrez Nájera y con él fundó la revista Azul.
Su primera obra, la novela El bachiller (1895) muestra rasgos naturalistas, y en sus primeros libros de poemas, Perlas negras y Místicas (1898), ya aparecen características modernistas. Es en esta época cuando también funda la Revista Moderna. En 1900 es mandado a la Exposición Universal de París. Allí conoce personalmente a VerlaineWilde y a Rubén Darío. Escribe cuentos, libros de viaje, ensayos y, sobre todo poesías reunidas en el libro El éxodo y las flores del camino (1902).
En 1901 conoce al gran amor de su vida, Ana Cecilia Luisa Dailliez, quién pierde la vida el 7 de enero de 1912. Su religiosidad la manifestó en obras como Los jardines interiores (1905), En voz baja (1909), Serenidad (1914), Elevación (1917) y Plenitud (1918). Su obra maestra es La amada inmóvil (1922), publicada póstumamente, inspirada en la muerte de Ana Daillez.
Amado Nervo falleció en la ciudad de Montevideo, Uruguay, el 24 de mayo de 1919, en el Parque Hotel, donde vivía, siendo Jefe de la Misión Diplomática de México en Uruguay. 

¡OH CRISTO! 

Amado Nervo 

Ya no hay un dolor humano que no sea 
mi dolor; 
ya ningunos ojos lloran, ya ningún 
alma se angustia sin que yo me 
angustie y llore; 
ya mi corazón es lámpara fiel de 
todas las vigilias, 
¡oh Cristo! 
En vano busco en los hondos 
escondrijos de mi ser 
para encontrar algún odio: nadie 
puede herirme ya sino de piedad y 
amor. Todos son yo, yo soy todos, 
¡oh Cristo! 

¡Qué importan males o bienes! Para mí 
todos son bienes.

El rosal no tiene espinas: para mí sólo 
da rosas. 
¿Rosas de pasión? -¡Qué importa! Rosas 
de celeste esencia, purpúreas como 
sangre que vertiste por nosotros, 
¡oh Cristo! 

Rubén Darío

nacio 18 de enero de 1867 en San Pedro de Metapa, hoy Ciudad Darío, Matagalpa, Nicaragua.
Primer hijo de Manuel García y Rosa Sarmiento. Fue criado por su abuela tras la separación de sus padres.

A los 14 años se trasladó a Managua donde trabajó como secretario en la Biblioteca Nacional. Por entonces ya es reconocido llamándole el “poeta-niño”. Se hospeda en casa del doctor Modesto Barrios, quien le acompañó a fiestas y tertulias literarias.
Rubén Darío Con apenas 19 años de edad, en el año 1886, viaja a Santiago de Chile, donde publicó su primer gran título: Azul (1888), libro que llamó la atención de la crítica.

De regresó a Managua contrajo matrimonio con Rafaela Contreras Cañas el 21 de junio de 1890; quince meses después nació su primer hijo, y en 1893, falleció su esposa durante una operación quirúrgica. Rubén Darío es viudo y, borracho y a punta de pistola, el 8 de marzo de 1893, se casa a la fuerza con Rosario Emelina, cuyos dos hermanos militares le tendieron una trampa. 
En 1913 cae en un profundo misticismo y se retira a la isla de Mallorca. Allí empieza a escribir una novela La isla de oro -que nunca llegó a concluir- en la que analiza el desastre hacia el que está caminando Europa. También compone Canto a Argentina y otros poemas (1914), un libro dedicado a este país en el año de la celebración de su centenario en que quiso seguir el modelo del Canto a mí mismo de Walt Whitman.

En 1915 publica La vida de Rubén Darío, año en que regresó a a América. Enfermo en la capital de Guatemala, llegó Rosario Emelina para acompañarlo de regreso a su país, donde se dice que le atendió desde el 4 de julio de 1915, al 6 de febrero de 1916, fecha en la que Rubén Dario falleció en León

LO FATAL 

A René Pérez 

Dichoso el árbol que es apenas sensitivo, 
y más la piedra dura, porque ésa ya no siente, 
pues no hay dolor más grande que el dolor de ser vivo, 
ni mayor pesadumbre que la vida consciente.

Ser, y no saber nada, y ser sin rumbo cierto, 
y el temor de haber sido y un futuro terror 
Y el espanto seguro de estar mañana muerto, 
y sufrir por la vida y por la sombra y por 

lo que no conocemos y apenas sospechamos, 
y la carne que tienta con sus frescos racimos, 
y la tumba que aguarda con sus fúnebres ramos, 
¡y no saber adónde vamos, 
ni de dónde venimos! 


Gabriela Mistral 


Gabriela Mistral Lucila de María del Perpetuo Socorro Godoy Alcayaga 
Poetisa y diplomática chilena 
La experiencia es un billete de lotería comprado después del sorteo 
Gabriela Mistral 
nació el 7 de abril de 1889, en la ciudad de Vicuña, cuarta región, Chile.
Hija de Juan Jerónimo Godoy y Petronila Alcayaga, quienes la bautizaron con el nombre de Lucila. A los tres años su padre abandona la familia.
Hija de un profesor rural y con una hermanastra de la misma profesión que le enseñó las primeras letras, ingresó en la escuela de La Unión, finalizando su enseñanza básica en Vicuña, donde la directora creía que padecía "retraso mental".
A los 17 años conoce a Romelio Ureta, empleado de Ferrocarriles, "el amor de su vida". Durante este período, da clases en la escuela de La Cantera.
En 1907 escribe para los periódicos "La Voz de Elqui" y "La Reforma". Un año después figura en la antología "Literatura Coquimbana" de L. Carlos Soto Ayala, en la cual éste le dedica un breve estudio y selecciona tres prosas poéticas de la autora: "Ensoñación", "Junto al mar" y "Carta íntima".
El 25 de noviembre de 1909, a los 26 años de edad, se suicida en Coquimbo, Romelio Ureta. Se dice que sustrajo dinero de la caja del ferrocarril para socorrer a un amigo y al no poder restituirlo acabó con su vida. En sus bolsillos se encontró una tarjeta con el nombre de Lucila Godoy.
Su poesía ha sido traducida al inglés, francés, italiano, alemán y sueco siendo muy influyente en la obra creativa de muchos escritores latinoamericanos posteriores, como Pablo Neruda y Octavio Paz. Sus diversos poemas escritos para los niños se recitan y cantan en muy diversos países. En 1945 fue el primer escritor latinoamericano que consiguió el Premio Nobel de Literatura. En 1951, le otorgaron el Premio Nacional de Literatura de su país.
En 1928, y junto con su íntima amiga Palma Guillén adoptó a Juan Miguel Godoy Mendoza, nacido en Barcelona en 1925, hijo de su medio hermano Carlos Miguel Godoy y de la catalana Marta Mendoza. El niño acompañó a Mistral en sus viajes y cuando residían en Petrópolis (Brasil), se enamoró de una joven alemana con la que deseó contraer matrimonio. Gabriela se opuso a la boda y el joven se suicidó ingiriendo arsénico el 14 de agosto de 1943.
Gabriela Mistral se relacionó íntimamente con Doris Dana, a la que conoció en Nueva York en 1946. Dana era lesbiana y 31 años más joven que ella. Tenía 27 años cuando se conocieron y a Gabriela le recordaba físicamente a la actriz Katherine Hepburn. Su amiga trabajó ocasionalmente en el Departamento de Estado y a pesar de no compartir lenguaje su relación íntima duró hasta la muerte de la poetisa. Doris Dana se convirtió en albacea de su obra y también su principal heredera.
Tras una larga enfermedad, Gabriela Mistral fallece el 10 de enero de 1957, a las 4,10 horas, en el Hospital General de Hempstead, en Nueva York. No murió sola, en todo momento fue asistida por Doris Dana. Sus restos reciben el homenaje del pueblo chileno, declarándose tres días de duelo oficial. Los restos de Gabriela Mistral llegaron a Chile el 19 de enero de 1957 y se velaron en la Universidad de Chile, donde 400 niñas del Liceo Nº 6, del que Gabriela fue su primera directora, hicieron guardia de honor. Recibió sepultura en Montegrande y se le rindió homenaje en todo el Continente y en la mayoría de los países del mundo. 
Desolación, 1922 

La bruma espesa, eterna, para que olvide dónde
me ha arrojado la mar en su ola de salmuera.
La tierra a la que vine no tiene primavera:
tiene su noche larga que cual madre me esconde.

El viento hace a mi casa su ronda de sollozos
y de alarido, y quiebra, como un cristal, mi grito.
Y en la llanura blanca, de horizonte infinito,
miro morir intensos ocasos dolorosos.

¿A quién podrá llamar la que hasta aquí ha venido
si más lejos que ella sólo fueron los muertos?
¡Tan sólo ellos contemplan un mar callado y yerto
crecer entre sus brazos y los brazos queridos!

Los barcos cuyas velas blanquean en el puerto
vienen de tierras donde no están los que son míos;
y traen frutos pálidos, sin la luz de mis huertos,
sus hombres de ojos claros no conocen mis ríos.

Y la interrogación que sube a mi garganta
al mirarlos pasar, me desciende, vencida:
hablan extrañas lenguas y no la conmovida
lengua que en tierras de oro mi vieja madre canta.

Miro bajar la nieve como el polvo en la huesa;
miro crecer la niebla como el agonizante,
y por no enloquecer no encuentro los instantes,
porque la "noche larga" ahora tan solo empieza.

Miro el llano extasiado y recojo su duelo,
que vine para ver los paisajes mortales.
La nieve es el semblante que asoma a mis cristales;
¡siempre será su altura bajando de los cielos!

Siempre ella, silenciosa, como la gran mirada
de Dios sobre mí; siempre su azahar sobre mi casa;
siempre, como el destino que ni mengua ni pasa,
descenderá a cubrirme, terrible y extasiada.


José Santos Chocano 

José Santos Chocano José Santos Chocano 
Escritor peruano 
Nació el 14 de mayo de 1875 en Lima.

Hijo de un militar y de la hija de un minero español enriquecido en el Potosí.

A los 19 años es encarcelado en la prisión de Casamatas del Callao por sus ideas políticas.
En el año 1896 edita la revista "La Neblina". De 1901 a 1905 ejerce como diplomático en Centroamérica y Colombia. Reside también en España y Nueva York.

Cantó los exteriores de América: naturaleza, leyendas y episodios históricos, relatos con indios, temas de la acción política. Se puso a la cabeza del movimiento modernista en el Perú.

Personaje muy polémico, en 1920, dispara y causa la muerte del periodista Edwin Elmore, al producirse un fuerte enfrentamiento entre ambos. Defensor del americanismorevolucionario, protector de los indios y opositor del imperialismo estadounidense.

En Guatemala es sorprendido en una conjura y condenado a muerte. La intercesión del Papa y de Alfonso XIII le salvan.

Regresa a Perú y es detenido, procesado y condenado.

Al quedar libre viaja a Santiago de Chile y allí permanece hasta su muerte, ocurrida trágicamente el 13 de diciembre de 1934. Chocano iba en el tranvía, y un individuo, a quien el poeta había comprometido en la búsqueda de cierto tesoro oculto, sintiéndose defraudado lo abordó y mató a cuchilladas.

Chocano se había casado tres veces, sin molestarse en anular los vínculos anteriores. 

lasón 

Soy el cantor de América autóctono y salvaje: 
mi lira tiene un alma, mi canto un ideal. 
Mi verso no se mece colgado de un ramaje 
con vaivén pausado de hamaca tropical...

Cuando me siento inca, le rindo vasallaje 
al Sol, que me da el cetro de su poder real; 
cuando me siento hispano y evoco el coloniaje 
parecen mis estrofas trompetas de cristal.

Mi fantasía viene de un abolengo moro: 
los Andes son de plata, pero el león, de oro, 
y las dos castas fundo con épico fragor.

La sangre es española e incaico es el latido; 
y de no ser Poeta, quizá yo hubiera sido 
un blanco aventurero o un indio emperador.